Para batallar el apetito y la pobreza, es completamente precisa la transformación de los campos agrícolas para emprender el cambio climático para la adaptación y la mitigación, y este cambio da provecho y ocasiones notables para proteger los elementos naturales. En la cima de la COP21 en París, los países adoptaron compromisos sin precedentes para amoldarse y atenuar el cambio climático. El acuerdo reconoce «la prioridad primordial de salvaguardar la seguridad alimenticia y terminar al apetito y inseguridades particulares de los sistemas de producción de alimentos a los impactos desfavorables del cambio climático». Esto se refleja en los compromisos de los países en los que los ámbitos agrícolas son una prioridad señalada. En este momento, en la COP22 en Marruecos, poseemos la posibilidad de efectuar adelantos significativos, realizando de la agricultura una sección fundamental de la solución.
La transformación hacia una agricultura sostenible requerirá resoluciones a la medida y un ambiente propicio, elementos y tiempo. Los primordiales productores de alimentos mundiales tienen dentro a cerca de 500 millones de pequeños labradores y labradores familiares que se ocupan de una extensa variedad de prácticas agrícolas y viven en distintas propiedades del ambiente. Como resultado, no hay una fórmula única para la sostenibilidad.
Invernaderos en Marruecos
Entre los adelantos mucho más esenciales de los últimos tiempos es el aumento de invernaderos, singularmente de tomate, de lo que es el primordial exportador.
La escencial virtud que da Marruecos es que puede cultivar hortalizas fuera de la temporada de otras zonas mediterráneas.
¿Qué es la agricultura de subsistencia?
La agricultura de subsistencia es un género de agricultura aplicado a lo largo de una cantidad enorme de años en el mundo entero, pero en este momento solo se ejerce en ciertas secciones. Radica en plantar diferentes cultivos para consumo familiar y no con objetivos de comercialización. La mayor parte de estas cosechas se consumen en el seno familiar, y solo una pequeña parte puede destinarse en venta. La agricultura de subsistencia es la antítesis de la agricultura comercial, ya que en esta última la cosecha se destina íntegramente en venta. En el momento en que un productor ejerce la explotación de subsistencia, debe encargarse de un sinnúmero de cultivos o ganado que se han amoldado bien a las condiciones locales (ciertos cereales, frutas, verduras, pecuaria minifundista, etcétera.).
¿Los labradores marroquíes son siendo conscientes de este cambio extremista a escala mundial?
La contestación es precisamente sí… Los labradores marroquíes tuvieron a lo largo de años ingreso a programa revolucionario para una mejor administración de sus explotaciones y, por consiguiente, una mejor eficacia. Además de esto, tenemos la posibilidad de seguir la hipótesis de que hay componentes que tienen la posibilidad de limitar la adopción de estas novedosas tecnologías por la parte de los labradores: la carencia de herramientas y también información sobre digitalización, nivel educativo y edad. de labradores, el tamaño de la explotación…, en otras expresiones, un agricultor de edad avanzada puede hallar increíblemente bien difícil invertir en una práctica avanzada en comparación con los labradores jóvenes con una «forma de pensar de desarrollo». Se presentarán diferentes tecnologías a los labradores, otra revolución agrícola fundamentada en la transformación digital. Es en esta visión que las startups y las compañías prácticamente han comenzado a ingresar la digitalización en el ámbito agrícola. La digitalización de este ámbito se convirtió en una obligación para llevar a cabo en frente de una sucesión de retos que encara al ámbito y sobrepasar muchas restricciones inherentes a este ámbito. Y tenemos la posibilidad de refererir como un ejemplo la interfaz AgriBusiness.ma que muestra una ocasión real a los labradores marroquíes de vender de manera fácil su producción agrícola, equipos agrícolas, tierras o huertas… y estar informados de todas y cada una de las noticias del campo de Agronegocios en Marruecos para vender o obtener con costos mucho más con transparencia.
Autora: Marta Comenares. www.Terrachidia.es
Un oasis es un aislamiento espacial en un ambiente árido y geográficamente distanciado de enormes núcleos de población pero con una enorme particularidad: la predisposición de agua. Sin esta, difícilmente los humanos hubiesen desarrollado la vida que existe y que consigue escenarios de enorme riqueza y valor, tanto en los puntos biológicos como humanos, al construirse una cultura propia amoldada al medio. (Llovera; Seva; Hamdaoui, 2012). La composición del oasis una parte de un sistema agroecológico de los binomios agua/suelo, flora/fauna y tres estratos vegetales en la distribución de los huertos: a nivel del suelo están los cultivos de hortalizas, forrajes y plantas aromatizadas/medicinales ; en un segundo nivel se definen los árboles frutales y en el nivel tercero están las palmeras datileras con sus distintas variaciones. (Vargas LLovera, 2008). Las palmeras pertenecen a los elementos propios mucho más esenciales para los ecosistemas de los oasis, en tanto que dan condiciones microclimáticas a otros cultivos, reduciendo la erosión causada por la acción del viento y la evaporación mediante la sombra. (Heidecke, 2009). La vida de las ciudades de los oasis del Valle del Draâ, en el sur de Marruecos, se ha dirigido comúnmente a la pelea contra el progreso del desierto y el aprovechamiento sostenible del agua. Su supervivencia, fundamentada en una economía de subsistencia, fué siempre y en todo momento relacionada a la explotación agrícola de las tierras fértiles. Los oasis fueron configurados a lo largo de decenios en ciclos ecológicos cerrados y independientes.
El parque agrícola marroquí se ha apoyado históricamente en un género de explotación social y de micropropiedades de carácter familiar. No obstante, la agricultura fue el ámbito mucho más perjudicado por la colonización (1912-1956), que se dirigió a edificar una agricultura de signo capitalista, monetaria y mercantil, destinada a agradar de artículos a las deficitarias metrópolis. Con la independencia, las políticas que procuran el beneficio económico llevaron a desarrollar cultivos orientados al mercado exterior, y en la actualidad, singularmente al de la Europa social. El propósito de conseguir provecho desde la vida de enormes mercados de exportación y de esenciales economías de escala se impuso sobre la explotación agrícola a nivel regional. O sea lo que Guerraoui llamó la “forma capitalista de producción agrícola”.(Guerraoui ,1983) Esta y otras políticas a enorme escala, fundamentadas en la mercantilización y avance dispar han causado enormes desequilibrios territoriales en Marruecos. Al paso que las enormes urbes fueron las receptoras de enormes inversiones, lo que les permitió amontonar elementos, las comunidades rurales del sur vieron quebrado el período de autosuficiencia y dependen de la llegada de agua y alimentos para subsistirlos. Pero la amenaza no solo viene cierta desde el criterio económico por la pérdida de aptitud económica de la población, sino más bien desde el criterio ambiental, ya que el abandono de las tierras arables y la pérdida de área de palmerales ponen bajo riesgo el servicio ambiental que efectúan en la pelea contra el progreso del desierto.