En muchos países en desarrollo, entre el 25 y el 50 % del valor total del grano se pierde entre la cosecha y el consumo, principalmente debido a técnicas de almacenamiento deficientes, desperdicio a nivel de finca y procesamiento. Esto conduce a menores ingresos para los agricultores y precios más altos para los compradores. Además, existe una presión sobre los agricultores para que aumenten los niveles de producción a fin de lograr mayores rendimientos de arroz y terminan usando más tierra y fertilizantes, lo que causa un daño masivo a los recursos naturales. Este artículo tiene como objetivo enseñarle cómo minimizar las pérdidas de granos y mantener la calidad del arroz durante períodos de almacenamiento más prolongados.
Paso 1: Gestión de postproducción
La gestión de posproducción tiene que ver con cómo manejar el arroz; desde el momento en que se cosecha hasta el momento en que se vende. Se involucran varios procesos como el corte, acarreo, limpieza y mercadeo del arroz, etc. Es especialmente importante porque evita pérdidas tanto cualitativas como cuantitativas y, con una gestión de posproducción deficiente, es probable que pierda hasta el 50 % de su rendimiento total.
Paso 2: Cosecha
Este es simplemente un proceso de recolectar la cosecha madura del campo; en nuestro caso, arroz. La cosecha comienza con el corte de la cosecha y termina después de que se haya preparado para secarse. Implica:
– Corte
– Secado de campo
– Acarreo
– Apilamiento
– Trilla
– Limpieza
– Embalaje (para enviarlo más lejos para el secado)
Cosechar en el momento correcto asegura que obtenga el máximo rendimiento, disminuyendo la degeneración de la calidad. Sin embargo, hay ciertas pérdidas físicas que uno tiene que enfrentar durante las operaciones de cosecha. Estos se basan libremente en las operaciones y la maquinaria utilizada durante la cosecha. Estas pérdidas:
– Ocurre durante el corte
– Ocurren durante la trilla y
– Ocurren durante el manejo de granos
Para minimizar, es importante que mida las pérdidas en cada operación de cosecha y trabaje en ello.
Paso 3: Secado
La operación más crítica una vez finalizada la cosecha, el secado reduce el contenido de humedad del grano a un nivel seguro, ideal para almacenarlo por más tiempo. El grano cargado de humedad es propenso a la decoloración, el desarrollo de moho y la infestación de plagas. También reduce la tasa de germinación de la semilla, lo que disminuye la calidad general del grano. Sucede cuando tú:
– Espere demasiado antes de comenzar a secar
– No lo seques lo suficiente, sea cual sea tu propósito
– Técnicas incorrectas
Idealmente, debe comenzar a secar dentro de las 24 horas posteriores a la cosecha. Los granos deben secarse a diferentes contenidos de humedad (CH) para diferentes propósitos.
– 14 % o menos de MC para almacenar hasta unos pocos meses
– 13% o menos de MC para almacenar durante 8 a 12 meses
– 9% o menos por almacenar más de un año
Técnicas de secado:
– Sistemas tradicionales: Secado al sol, secado en campo y apilamiento
– Sistemas mecánicos: Secado por aire caliente, secado a baja temperatura, secado solar y enfriamiento de granos