Entre las primeras herramientas agrícolas inventadas por el hombre fue el arado. Los primeros arados brotaron en África en la región que en este momento conocemos como Egipto hace unos 5000 años según unos historiadores y cerca de 3500 según otros. Los primeros azados eran esencialmente una optimización de las herramientas que se usaron a lo largo de cientos de años para abrir la tierra y poner en las semillas, estos palos gruesos primero y azadas, picos y zapas una vez que rompían la cubierta superior del lote para lograr plantar los alimentos.
Maquinaria agrícola: algo de historia
El primer avance vino del arado, un paso primordial en el que se pasó de eliminar la tierra pegando- con herramientas tipo azadas a seguir con ellas introduciéndolas en el suelo triunfando la fuerza de tiro. Y esta fue la primera máquina desarrollada para trabajar los cultivos, accionadas por la fuerza de la gente o por los animales. A lo largo de la Revolución Industrial los arados de madera fueron reemplazados por arados de hierro o acero, y se pasó de segar el trigo a mano con una hoz o una hoz, a ingresar la segadora para llevar a cabo la siega continua.
Géneros de herramientas agrícolas viejas
Ahora, garantizamos un catálogo con herramientas agrícolas viejas imprescindibles para realizar las primordiales tareas agrícolas, muchas de ellas todavía , más que nada en las áreas despobladas donde no llegan los avances en tecnología o no tienen la posibilidad de ser comprados por sus altos costos, tal como a la agricultura ecológica.
- Hoz o segadera. Se usa para recortar yerba verde o cereales maduros. Está formada por una hoja de metal con forma de media luna unida a un mango para sostenerla. En contraste a la hoz, se puede usar con solo una mano. Los bordes de el papel tienen la posibilidad de ser planos o aserrados (la mucho más popularizada) para cosechar el grano.
- Pala. Se usa para cavar y desplazar superficialmente la tierra. Está formada por una hoja ancha fijada a un mango de longitud media. Puede enseñar puntas redondeadas o mucho más triangulares. Su empleo está extensamente extendido en agricultura, construcción y jardinería.
- Horca u horquilla. Pala con ganchos que tiene un mango riguroso. Frecuenta tener 2 o 4 ganchos. Se usa para desplazar y alzar paja, hojas y otros materiales.
- Hacha. Se usa para recortar madera, ramas, etcétera. Todavía es entre los instrumentos mucho más útiles a la agricultura. Precaución con una lámina afilada, muchas veces de metal, unida a un mango para lograr mantenerla.
- Zuela o zoleta. Azada pequeña que tiene un mango bastante corto con un martillo o hacha en uno de sus extremos. Se usa para arrastrar toda clase de material, llevar a cabo aberturas y fisuras, recortar y pegar madera, etcétera.
Aperos
A inicios del sXIX ahora existían prácticamente todos los aprendidos recientes, pero la poca capacidad de que disponían impedían que tuviesen una enorme anchura de trabajo y que labraran a enorme hondura. En 1908 se inventó la fresadora, la primera herramienta rotativa en una temporada donde la mayor parte de los tractores todavía no tenían toma de fuerza.
La recolección con hoz de una hectárea suponía usar unas 1400 horas de trabajo humano, incluyendo la preparación del suelo y la siembra manual. En estas situaciones, se impulsa la utilización de maquinaria. Pero esto asimismo tuvo a sus opositores por los probables daños que las máquinas tienen la posibilidad de o tengan la posibilidad de ocasionar (si bien no en todos los casos) frente a la operación humana.
Pala para labrar la tierra
Este elemento, de fuerte y rueca lámina de metal, es el aliado clásico de los labradores para labrar o eliminar la tierra. Es muy polivalente y puede sacarnos de un deber cualquier ocasión, sin precisar emplear las máquinas pesadas que lo han sustituido como las excavadoras.
Mucho más puntuto y filoso que la pala, esta herramienta es fabulosa para cavar en terrenos duros, eliminar piedras, realizar zanjas o elaborar los huecos en la tierra para el sembrado.