La capital de españa, 12 de marzo.- Con ocasión del Día En todo el mundo de la Mujer, MUJERES PARA EL DIÁLOGO Y LA EDUCACIÓN (MDE) organizó una visita al Museo Arqueológico Nacional (MAN) el pasado 9 de marzo, centrada en evolución de las mujeres desde la prehistoria hasta la romanización.
La sociedad prehistórica era bastante igualitaria en lo que se refiere al reparto de tareas entre hombres y mujeres. En el Paleolítico, las mujeres se dedicaban a la caza, la pesca y recolección. Tenían un papel activo en todos y cada uno de los campos de la vida y compartían con los hombres toda clase de sacrificios.
Los desenlaces
Los desenlaces de la investigación detallan que las zonas mucho más fértiles de todo el mundo no hicieron siempre sociedades mucho más complicadas, y que el aspecto vital fue el género de comida elegida como cultivo primordial: cereales y grano versus raíces y tubérculos.
Mientras que raíces y tubérculos son susceptibles a la putrefacción y no se preservan bien por largos periodos de tiempo, las patentizas del estudio señalan que «la durabilidad del grano de los cultivos de cereales y la sencillez de almacenaje hacía muy correctos para el transporte y empleo de una élite distante”. para el avance agrícola, que inició la ‘segunda revolución’: la modificación en el cultivo de secano por las técnicas de barbecho, técnicas usadas ahora en la agricultura sumeria.
En esta temporada y en las llanuras de los Países Bajos, primero, y, a continuación, en Inglaterra, Escocia y Francia, se comenzó a achicar o remover en el secano el papel de barbecho, que quedaba de la rotación trienal, cultivando leguminosas forrajeras (trébol y alfalfa ) y forrajes de invierno (nabos, nabizas, coles y remolacha forrajeras), tal como m plantas industriales (lino y colza) y el cultivo de patatas y remolacha azucarera, la llamada mixed farming.
Tercera hipótesis: un cambio climático
La tercera hipótesis que podría argumentar el origen de esta novedosa forma de vida es la climática. Esto es, que las noticias llegaron en contestación a un cambio climático que limitó los elementos de las sociedades cazadoras, pescadoras y cosechadoras.
El tiempo y la vegetación vivieron esenciales transformaciones a lo largo de la ventana temporal donde se generaron los cambios que brindaron sitio al Neolítico. Tras el Último Máximo Glacial, hace unos 23.000-19.000 años, el tiempo comenzó a templarse. Se causó un incremento general de las temperaturas y la humedad que acabó en los principios del Holoceno, hace unos 11.500 años, en el momento en que se fijaron las primordiales peculiaridades del tiempo que nos divertimos hoy día.