En el contexto de la pandemia por Covid19, los gobiernos de América del Sur mantuvieron los extractivismos agropecuarios (agrícolas, ganaderos y forestales). En unos casos, se les muestra como solución a la caída de extractivismos en petróleo y minerales. En otras ocasiones se generan cambios entre diferentes modelos agropecuarios. Esta estrategia supone la persistencia de impactos sociales y ambientales, acentuando las asimetrías entre actores empresariales y labradores pequeños o campesinos.
Los modelos climáticos proyectan una mayor exposición a la inseguridad alimenticia en ALC
El estudio, Puerta de inseguridad al cambio climático y también impactos económicos en el ámbito agrícola en el ámbito Caribe cree el encontronazo potencial del cambio climático en la eficacia agrícola y el comercio de cultivos clave a nivel regional y nacional en la zona. Examina la situación en Argentina, Bolivia, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, Jamaica, México, Panamá, Perú, República Dominicana y Uruguay y proporciona sugerencias sobre medidas de adaptación para cultivos concretos.
Los modelos climáticos proyectan un incremento medio de 1°C-4°C en las temperaturas en Antes de Cristoy una disminución del 30% en las precipitaciones. Esta renovadora investigación halla que, en todo el mundo, en un ámbito de “no cambio climático” (No-CC), se prevé que los costes de frijoles, maíz, arroz, soja y trigo aumenten hasta 2050 en un 4, 6%, 27,6%, 16,1%, 6,5% y 11,7% respectivamente, sobre los escenarios recientes.
El papel ecológico de Arvenses
A lo largo de un buen tiempo la vegetación espontánea, perimetral, etcétera, fué tema de indagaciones que no valoran esta flora, el día de hoy famosa como plantas arvensas. Colombia es el país mucho más abundante en condimentas vegetales de todo el mundo. La riqueza vegetal puede lograr unas 50 mil especies, al paso que todo el conjunto de naciones europeo no consigue las diez mil. Así como lo visualizaron anticipadamente el barón de Humboldt y los científicos patriotas de la expedición botánica, los sistemas selváticos de Colombia forman un banco inmensurable de materias primas, puesto en prueba con mayor rigor y claridad por medio de la investigación ecológica y molecular de las últimas décadas (Patiño, 2016).
Las flores de ciertas arvenses son asimismo una esencial fuente de alimento para múltiples insectos predadores (van Emden, 1965b). El polen ayuda a la producción de huevos de muchas moscas de sírfidos y se ha señalado como una fuente de alimento esencial para bastantes predadores Coccinellidae. Las crisopas semejan elegir flores compuestas que proveen néctar para agradar sus requerimientos de azúcar (Hagen, 1986).